Investigación (II)
Después de un breve paréntesis para recuperar nuestras fuerzas, volvemos a la carga con nuevas revelaciones que harán tambalearse los cimientos del stablishment y demostrarán, más allá de toda duda razonable, la existencia de una conspiración internacional contra Plutón.
Como todos sabemos, Plutón ha perdido la categoría de planeta porque no entra en la definición adoptada por la Unión Astronómica Internacional (UAI). Esta definición es la siguiente (Wikipedia):
"Un planeta es un cuerpo celeste que (a) está en órbita alrededor del Sol, (b) tiene suficiente masa para que su propia gravedad supere las fuerzas de cuerpo rígido de manera que adquiera una equilibrio hidrostático (forma prácticamente redonda), (c) ha limpiado la vecindad de su órbita".
Vemos pues que ninguno de los argumentos tradicionalmente utilizados para desprestigiar a Plutón (y especialmente el del tamaño) se encuentran presentes en esta definición. Lo cual nos lleva al absurdo de que la definición de "planeta enano", la categoría en la que han encuadrado a Plutón, no se basa en el tamaño (entonces, ¿por qué lo llaman "enano"? Primera muestra de la conspiración).
Pero vamos a analizar la definición de "planeta enano":
"Un planeta enano es un cuerpo celeste que (a) está en órbita alrededor del Sol, (b) tiene suficiente masa para que su propia gravedad supere las fuerzas de cuerpo rígido de manera que adquiera un equilibrio hidrostático (forma casi redonda), (c) no ha limpiado la vecindad de su órbita y (d) no es un satélite".
Es decir, que si comparamos ambas definiciones vemos que la diferencia es la limpieza de la vecindad de su órbita. Si Plutón es un planeta enano, es porque no ha limpiado la vecindad de su órbita.
¿Y qué carajo es eso de la vecindad de su órbita? Pues pásmense todos:
"La definición científica o matemática exacta de "la vecindad de la órbita" de un objeto no se ha explicado".
No se ha explicado. Es decir, que Plutón es un planeta enano porque no cumple una condición que no ha sido definida todavía. O, dicho en román paladino: no es un planeta porque a la UAI no le sale de los cojones. ¿Puede caber alguna duda de que la exclusión de Plutón de la relación de planetas clásicos se debe a oscuros intereses no aclarados, y no a razones científicas?
Por otra parte leo en otro artículo de Wikipedia que la causa de que Plutón no cumpla este requisito (que, recordemos, no ha sido definido) es "que la órbita de Plutón se cruza con la de Neptuno". Pero es evidente que esta explicación es falsa dado que, en ese caso, ¡Neptuno tampoco podría ser un planeta! Si la órbita de Plutón se cruza con la de Neptuno, la de Neptuno también se cruza con la de Plutón; y por lo tanto, o los dos son planetas, o ninguno de los dos lo es. ¿Qué contactos ha movilizado Neptuno para que se le dote de un status distinto?
Seguiremos investigando.
Como todos sabemos, Plutón ha perdido la categoría de planeta porque no entra en la definición adoptada por la Unión Astronómica Internacional (UAI). Esta definición es la siguiente (Wikipedia):
"Un planeta es un cuerpo celeste que (a) está en órbita alrededor del Sol, (b) tiene suficiente masa para que su propia gravedad supere las fuerzas de cuerpo rígido de manera que adquiera una equilibrio hidrostático (forma prácticamente redonda), (c) ha limpiado la vecindad de su órbita".
Vemos pues que ninguno de los argumentos tradicionalmente utilizados para desprestigiar a Plutón (y especialmente el del tamaño) se encuentran presentes en esta definición. Lo cual nos lleva al absurdo de que la definición de "planeta enano", la categoría en la que han encuadrado a Plutón, no se basa en el tamaño (entonces, ¿por qué lo llaman "enano"? Primera muestra de la conspiración).
Pero vamos a analizar la definición de "planeta enano":
"Un planeta enano es un cuerpo celeste que (a) está en órbita alrededor del Sol, (b) tiene suficiente masa para que su propia gravedad supere las fuerzas de cuerpo rígido de manera que adquiera un equilibrio hidrostático (forma casi redonda), (c) no ha limpiado la vecindad de su órbita y (d) no es un satélite".
Es decir, que si comparamos ambas definiciones vemos que la diferencia es la limpieza de la vecindad de su órbita. Si Plutón es un planeta enano, es porque no ha limpiado la vecindad de su órbita.
¿Y qué carajo es eso de la vecindad de su órbita? Pues pásmense todos:
"La definición científica o matemática exacta de "la vecindad de la órbita" de un objeto no se ha explicado".
No se ha explicado. Es decir, que Plutón es un planeta enano porque no cumple una condición que no ha sido definida todavía. O, dicho en román paladino: no es un planeta porque a la UAI no le sale de los cojones. ¿Puede caber alguna duda de que la exclusión de Plutón de la relación de planetas clásicos se debe a oscuros intereses no aclarados, y no a razones científicas?
Por otra parte leo en otro artículo de Wikipedia que la causa de que Plutón no cumpla este requisito (que, recordemos, no ha sido definido) es "que la órbita de Plutón se cruza con la de Neptuno". Pero es evidente que esta explicación es falsa dado que, en ese caso, ¡Neptuno tampoco podría ser un planeta! Si la órbita de Plutón se cruza con la de Neptuno, la de Neptuno también se cruza con la de Plutón; y por lo tanto, o los dos son planetas, o ninguno de los dos lo es. ¿Qué contactos ha movilizado Neptuno para que se le dote de un status distinto?
Seguiremos investigando.
2 Comments:
Solo quería aclarar algo respecto del confuso criterio de "no haber limpiado la órbita". En realidad quiere decir que no deben haber otros cuerpos "dominantes" dentro de su órbita. La masa de Plutón es muy inferior a la de Neptuno, de modo que puede inferirse que el "propietario" de la órbita es el cuerpo dominante dado que en este sentido la ley de gravitación universal es muy clara. Si bien es cierto que ambos comparten una fracción de sus órbitas, no menos cierto es que la masa de Plutón es tan inferior a la d Neptuno que éste último parece atraerlo. De hecho se cree que si las diferencias de masa entre estos dos planetas fuera mayor, Plutón no tendría la autonomía suficiente para ser un planeta y se convertiría en un satélite de Neptuno con casi total seguridad.
La conclusión es la misma, es Neptuno el que no ha logrado limpiar su órbita y el pequeño (no tanto según las últimas mediciones) merece ser planeta tan sólo por torear a ese grandote.
Publicar un comentario
<< Home